En este lado del mundo todavía me quedan unos minutos de celebración y de reflexión.
Resulta que, hace siete años decidí aceptar dos compromisos que definieron, definen y definirán mi vida: primeramente, quien ha sido desde hace 13 años mi compañera, mi complice, mi amiga y mi amante, y yo aceptamos llevar nuestra relación al siguiente nivel, y en un pequeña celebración en esta pequeña ciudad que adoptamos como nuestro hogar, Puerto Vallarta, y rodeados de un pequeño grupo de las personas más queridas ( no todas, lamentablemente) llevamos a cabo nuestra boda, una sincera celabración a un amor que comenzó sin expectativas y que ha crecido hasta ser el más profundo.
A mi todavía me llena de alegría acordarme de ese día, por todo el cariño que recibimos por parte de nuestra familia – la natural y la que conforman nuestros amigos- y por el pacto que, Edna, mi esposa, y yo sellamos, y el cual se va conformando, a diario, en una aventura con muchas subidas y bajadas, curvas y tirones, pero que no puedo más que estar agradecido por disfrutar, día a día.
Y por el otro lado, Alx, nuestro fotógrafo de bodas, me mostró que es posible capturar la belleza de un momento lleno de emociones de forma casual, divertida y, sobre todo, genuina. Y así es comodescubrí que eso quiero hacer como forma de vida, y que esa responsabilidad también prometo cumplirla y hacerla con todo el gusto del mundo.
A mi esposa: gracias por seguirme auque parezca que el camino vaya de subida y a un destino indefinido. Te amo!